Pensaba cuando salia de Rosario si me pone triste irme o volver, pero cada vez que viajo ese rato en la terminal de micros es difícil. Dan ganas de quedarse en todos lados.
Quizás algo se queda y nos vamos quedando con lo que queda.
miércoles, 2 de mayo de 2012
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario